sábado, 1 de julio de 2017

EL CARD. MÜLLER FRENA EL ACUERDO



EL CARDENAL MÜLLER, COMO BENEDICTO XVI EN 2012, PONE EL FRENO A UN POSIBLE ACUERDO DOCTRINAL CON LA FSSPX
La Casa General de la FSSPX acaba de comunicar a todos sus miembros el contenido de una carta del Card, Gerhard Müller que tuvo, para los ingenuos, el efecto de una ducha de agua fría, o más bien helada. He aquí los principales extractos, los más “sabrosos”.
“Como ustedes lo saben, el Papa Francisco manifestó varias veces su benevolencia hacia su Fraternidad Sacerdotal, en particular, concediendo a todos los sacerdotes miembros, la facultad de confesar válidamente a los fieles y autorizando a los Ordinarios del lugar a conceder las licencias para la celebración de los matrimonios de los feligreses que siguen la actividad pastoral en su Fraternidad. Por otra parte, la discusión continúa respecto a las cuestiones relativas al pleno restablecimiento de la comunión de su Fraternidad con la Iglesia católica.
A este respecto, con la aprobación del Soberano Pontífice, juzgué necesario someter a la Sesión Ordinaria de nuestra Congregación, reunida el pasado 10 de mayo, el texto de la Declaración doctrinal que usted transmitió durante el encuentro del 13 de junio de 2016 [Texto secreto. Nota de NP], como condición necesaria para el pleno restablecimiento de la comunión. He aquí las decisiones unánimes de todos los Miembros de nuestro Dicasterio:
1) Es necesario exigir a los miembros de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X la adhesión a la nueva fórmula de la Professio fidei de 1988 (cf. en anexo). En consecuencia, ya no es suficiente pedirles emitir la Professio fidei de 1962. [La profesión de fe de 1988 permite a Roma obligar a los que la formulan, a acatar el Vaticano II y el "magisterio" posterior. “Los errores del Concilio y sus reformas siguen siendo la norma oficial consagrada por la profesión de fe del Cardenal Ratzinger” (Mons. Lefebvre, “Itinerario Espiritual”, Prólogo). Nota de NP]
2) El nuevo texto de la Declaración doctrinal debe contener un párrafo en el cual los signatarios declaran, de manera explícita, su aceptación de las enseñanzas del Concilio Vaticano II y las del período postconciliar, concediendo a dichos afirmaciones doctrinales el grado de adhesión que les es debido. [Para el Card. Müller, debe exigirse a la FSSPX la aceptación absoluta del Vaticano II. Nota de NP] 
3) Los miembros de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X deben reconocer, no solamente la validez, sino también la legitimidad del Rito de la Santa Misa y de los Sacramentos, según los libros litúrgicos promulgados después del Concilio Vaticano II” [Esta exigencia inaceptable de Roma ya había sido cumplida por Mons. Fellay en la Declaración Doctrinal del 2012: “7. Nosotros declaramos reconocer la validez del sacrificio de la Misa y de los Sacramentos celebrados con la intención de hacer lo que hace la Iglesia según los ritos indicados en las ediciones típicas del Misal romano y de los Rituales de los Sacramentos legítimamente promulgados por los papas Paulo VI y Juan Pablo II.”. Nota de NP].
Y el querido cardenal concluye, in cauda venenum, que “durante la Audiencia concedida al Cardenal Prefecto, el 20 de mayo de 2017, el Soberano Pontífice aprobó estas decisiones”. [Acto que no debe interpretarse como definitivo o irrevocable. Nota de NP]
En la carta que la acompaña, el P. Thouvenot recuerda, muy “oportunamente”, las palabras de Mons. Fellay al final de la reunión de los superiores mayores en Anzère el 28 de junio de 2016:
La Fraternidad San Pío X, no busca ante todo un reconocimiento canónico al que tiene derecho por ser una obra católica. La solución no es simplemente jurídica. Ella tiene una posición doctrinal que es imperativo manifestar. (…) La Divina Providencia no abandona a su Iglesia, cuyo jefe es el Papa, vicario de Jesucristo. Es por eso que un signo incuestionable de esta restauración será la clara voluntad del Soberano Pontífice de dar los medios para reestablecer el orden del sacerdocio, de la fe y de la Tradición, signo que será además el garante de la necesaria unidad de la familia de la Tradición”.
Estamos muy lejos del “sello” que algunos habían festejado grandemente, y no podemos más que agradecer a Nuestra Señora, en este centenario de las apariciones de Fátima, el haber alejado el peligro mortífero de un acuerdo de tontos, como en junio de 2012.
Oremos por nuestros superiores que practican un peligroso “tango” -tres pasos adelante y luego dos pasos atrás- y agradezcamos a la divina Providencia por continuar velando sobre la obra de restauración emprendida, hace casi 50 años, por Mons. Lefebvre, que demostró el mismo valor que nuestros siete decanos y las comunidades amigas fieles en su combate por la única verdad.
Finalmente, en este 1º de julio, permítanme expresar mi reconocimiento amistoso por la heroica obediencia de nuestro cofrade P. Patrick de La Rocque, quien aceptó con humildad su trasferencia-castigo a las Filipinas y a quien el Superior general de su querida Fraternidad le negó festejar sus 25 años de sacerdocio en Ecône por .
Christian LASSALE


CONCLUSIÓN DE NP: 

SE ALARGA EL "TANGO" DEL QUE HABLA EL ARTÍCULO. 

ANTES SE CERRÓ EL CAPÍTULO LEVADA Y SE ABRIÓ EL CAPÍTULO MÜLLER. AHORA SE CIERRA EL CAPÍTULO MÜLLER Y SE INICIA EL CAPÍTULO LADARIA. ¿CUÁL SERÁ LA POSTURA DEL SUCESOR DEL CARD. MÜLLER RESPECTO DE LA FSSPX? NO SE SABE TODAVÍA. ANTERIORMENTE, EN EL PROCESO DE REGULARIZACIÓN DE LA FSSPX, AL CAPÍTULO BENEDICTO SIGUIÓ EL CAPÍTULO FRANCISCO. MIENTRAS SE MANTENGA LA VOLUNTAD ACUERDISTA EN LA FSSPX, SE CERRARÁN Y SE ABRIRÁN MUCHOS MÁS CAPÍTULOS EN LA TRISTE HISTORIA DEL INTENTO DE LOS LÍDERES DE LA FRATERNIDAD POR LOGRAR UN ACUERDO TRAIDOR CON ROMA. 

ROMA APÓSTATA NO TIENE PRISA, PUES LA FSSPX, EN LA MEDIDA EN QUE ASPIRA AL ACUERDO, SE DEBILITA CADA DÍA MÁS EN CUANTO AL SAGRADO DEBER DE COMBATIR POR LA FE EN CONTRA DE LOS HEREJES LIBERALES Y MODERNISTAS QUE USURPAN LA JERARQUÍA DE LA IGLESIA.